jueves, 24 de marzo de 2011

corriendo la carrera

(Heb 12:1 RV1960) Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,

•Carrera, del griego agon, y significa batalla, lucha y conflicto

Corriendo en las condiciones adecuadas:

… despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia,

Hay que correr con la ropa adecuada.

•Una mañana estaba estacionado de frente hacia la carretera esperando encontrarme con una persona y al momento paso un ciclista profesional (un atleta)
• Atleta: uno que lucha, que batalla.
• Iba desde luego en una bicicleta profesional desde lejos se veía, su pedaleo y velocidad eran uniformes. El se veía fuerte, seguro y decidido, en realidad tenía una condición física excelente.

Hablando de condiciones, debemos ejercitar nuestra condición espiritual, para estar fuertes, sanos para la carrera que tenemos por delante. 1 de Timoteo 4:7-8

•Practica la fe, la oración, la perseverancia, ejercitémonos para tener buena condición espiritual

Su vestimenta era la adecuada (debemos despojarnos de todo peso y del pecado que nos asedia) un pantaloncillo corto, elástico, ajustable al contorno de las piernas, la camisa del mismo tipo y material, lo cual por supuesto lo hacía ligero, sin impedimentos ni estorbos para avanzar y tener velocidad.
Se imagina pedalear con chanclas, o con pantalón de mezclilla, o con cualquier otra prenda incomoda.

Despojémonos del lastre…

(Heb 12:1 NVI) … despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia.

•Lastre: Piedra, arena, agua u otra cosa de peso que se pone en el fondo de la embarcación, a fin de que esta entre en el agua hasta donde convenga, o en la barquilla de los globos para que asciendan o desciendan más rápidamente.
•Nos estorba, se fija: Poner dificultad u obstáculo a la ejecución de algo.
•¿Qué es aquello que está haciendo fuerza hacia abajo en tu vida? ¿Qué es aquello que te está impidiendo avanzar con fuerza?

… en especial del pecado que nos asedia.

El pecado:

1. tr. Cercar un punto fortificado, para impedir que salgan quienes están en él o que reciban socorro de fuera.
2. tr. Importunar a alguien sin descanso con pretensiones.

El lado opuesto: Corriendo la carrera con peso.

•Al mismo tiempo, como una escena única, preparada por Dios venia otro ciclista, un jovencito de venida vestido con un pantalón de mezclilla aguado y una camisa del mismo tipo igualmente aguada, en él se veía un esfuerzo, tenía que empujar para pedalear, su pancita le hacia un poco de estorbo y solo atinaba a ver al ciclista que pasaba al otro extremo de la carretera, su velocidad, su agilidad, su empuje, su bicicleta.
•¿Coincidencia? Dios preparo esta escena para mostrarme su palabra.


Ejercicios espirituales:

•El ayuno: para quitar estorbos
•La fe: para desarrollar nuestra resistencia y eliminar los pesos.
•La oración: para tener fuerzas de Dios
•La lectura de Su Palabra: Vitaminas superpoderosas para desarrollarme

Por último: ¿Cómo debo yo correr esta carrera?
Porque para poder correr primero la carrera debe haber una preparación que es despojarme de todo peso y del pecado que nos asedia.


1.Con paciencia: perseverancia, resistencia, de hecho hay algunas versiones que traducen con fortaleza
2.Con los ojos puestos en Jesús el autor y consumador de la fe.

culto domingo







viernes, 18 de marzo de 2011

fiesta de dizfraces











comienza a sembrar

Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre. 1 Pedro 1:23
Uno realmente no se emociona con la Palabra de Dios sino hasta que llegue a entender que no es solo una colección de promesas inspiradas por Dios. Es una fuerza viva que lleva dentro de sí el poder para hacer que esas promesas sean una realidad en su vida.
¿Es difícil para usted creer que tal cosa sea posible? No debería serlo. Puede observarlo en el mundo natural todo el tiempo.
Si yo pusiera una semilla de tomate en su mano y le dijera que dentro de esa pequeña semilla yace el poder para producir un tallo mil veces más grande que la semilla, para producir hojas, raíces y tomates rojos, usted no tendría ningún problema en creerlo. ¿Cierto? Sabe por experiencia que aunque esa semillita no parezca una fábrica de tomates, sin embargo, dado el ambiente propicio, llegará a ser una fábrica de tomates.
Jesús dice que la Palabra de Dios opera de acuerdo a ese mismo principio: hay poder milagroso dentro de ella. Es una semilla que una vez sembrada por la fe en el corazón humano producirá más bendiciones de las que usted pueda imaginarse.
Una vez que usted entienda ese principio, se entusiasmará con la Palabra de Dios. Eso me sucedió a mí. Hace muchos años vi lo que la Palabra podía hacer, vi el poder que había en ella. Así que puse una Biblia en cada habitación de mi casa y en mi automóvil, y tenía una grabadora de casetes prendida casi todo el tiempo.
Pasaba cada momento posible en la Palabra de Dios porque quería el poder de esa Palabra dentro de mí más que cualquier otra cosa del mundo. Sabía que quitaría las barreras de mi vida, barreras que me habían limitado y reprimido por años. Sabía que al leerla no estaba solo leyéndola, sino sembrando semillas: semillas de prosperidad, de salud, de protección y de victoria en todo aspecto de mi vida.
No trate la Palabra de Dios como cualquier libro, porque no lo es. Es la semilla espiritual que tiene poder sobrenatural en su interior para producir la cosecha de una vida entera. Entusiásmese con ella y comience hoy a sembrarla.
Escritura Devocional para leer :
1 Pedro 1:23
Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre